Se trata de un proceso que lleva meses de trabajo y que ya ha conseguido la Declaración de Impacto Ambiental, a primeros de junio, y la formulación de la Autorización Ambiental Integrada, hace tres semanas, según informa la empresa Ence en nota de prensa.
La Autorización Administrativa ha sido publicada este jueves en el Diario Oficial de Extremadura, y supone un "paso fundamental para el desarrollo del proyecto en Mérida y demuestra el interés estratégico de Ence por Extremadura".
De hecho, señala la empresa que esta comunidad autónoma "se está configurando como una de las de mayor presencia futura de los proyectos de renovables de Ence", una empresa que además de este proyecto de Mérida, Ence está empezando a desarrollar otro de construcción de una planta de biomasa en Alcántara (Cáceres), cuyo inicio administrativo fue publicado en junio en el DOE, explica.
POTENCIA DE 20 MEGAVATIOS
La futura planta de energía renovable con biomasa de Ence en Mérida tendrá una potencia instalada de 20 MW, suficientes para atender la demanda de energía eléctrica de una población de 145.000 personas durante un año, generará "energía 100 por cien renovable" y tiene "una fuerte componente de generación de empleo y riqueza en su entorno", señala la empresa.Así, ha apuntado que la gestión de la biomasa para convertirla en energía renovable hacen de ella "la materia prima que más empleo crea", hasta el punto de que, por cada MW de potencia instalada, el impacto sobre la economía local se traduce en una media de 20 nuevos empleos, entre directos, indirectos e inducidos.
Señala que Ence va a destinar a la construcción de la planta de Mérida una inversión industrial de unos 50 millones de euros.
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